La verdad, aquí, junto a la estufa de leña, en el sofá con la mantita, el mini ordenador, y más relajado, pues la nostalgia de este día nuboso, lluvioso a no poder más y demás cavilaciones que se me ocurren…, se me apoderan.
No es lo mismo que aquel día, martes, en el cual había estado lloviendo toda la noche y X. dormía apaciblemente en la habitación de invitados.
Me costó bastante dormir, ya había estado hablando con X. sobre la lluvia y el mal tiempo e, incluso hablé de ir a BCN en el coche…. Él había venido a casa el Lunes, el día de antes.
Pero la vida y el espíritu del motero es así, diferente.
Nos levantamos y desayunamos bien, el tiempo seguía cerrado, la humedad era tal que hasta moverse costaba trabajo. No dijimos nada, terminamos de desayunar, colocamos todo en las motos y no siendo muy pronto, allá más de las 10’30 h., iniciamos la medio-aventura que estoy a punto de narrar.
La lluvia nos regaló un lapsus pequeño de tiempo para irnos adaptándonos a la ctra. bien mojada por cierto, pero tras repostar en Carboneras, tomamos la N-420 hacia Teruel.
Era una fría mañana del mes de Abril, teníamos citas en la ciudad Condal y, a no ser que el destino dijera un NO rotundo, pues nosotros iríamos hacia adelante.
La verdad las manoplas son un gran invento, más yo que llevo calentadores, X. se los puso y aún tiene que hacer que funcionen.
Todo iba bien, y como se preveía, la lluvia empezó a caer, más que chirimiri.
Así poco a poco, de relax, se divisaba en cunetas de la carretera, y montes adyacentes, en el discurrir, mucha agua en los campos, y luego pasó a verse hasta nieve.
De lluvia a agua-nieve…, el indicador de la moto no paraba de parpadear, me indicaba que posibilidad de nieve…ugggg, y bueno, felices de ir en moto, sea como sea, aunque no es muy allá tanto frío, ver en el panel casi -1 bajo cero y una larga ruta por delante aún.
Pasamos un pequeño puerto, de más de 1000 metros antes de llegar a Teruel, había algo de nieve en la carretera, pero bueno como ha de ser será.
Hicimos una pequeña parada y a aprovechar el día, sea como sea, es lo que había.
Nos reíamos y es muy agradable no ir sólo en las rutas, las penas, aunque igual sean las mismas, se comparten.
Entre Teruel y Alcañiz, pues una parada, ya que hacía un frío del carajo y la humedad se metía en donde es imposible llegar y un buen almuerzo-comida, a base de gran bocata de Lomo con Queso, nos dejó no perfectos, pero sí con posibilidad de seguir camino por esa bonita ctra. rumbo a Alcañiz.
Tras Alcañiz, pusimos a tope de gasolina, la cosa cambió algo ambientalmente, seguía nublado, pero la lluvia cesó.
Más rectas, pasamos por el puente que cruza el Ebro, para salir a dar a Fraga.
Lo demás ya es historia, un buen Colacao en un bareto de la autovía, tras Lérida, rectas de autovía medio llena y así hasta Manresa, por donde entramos hacia A,tmella del Vallés, por las montañas y ctra. súper comarcal, pisando unos bonitos páramos montañeses, que me recordaban a Galicia, qué pasada de genial es el norte Barcelonés.
Lo demás fue cuestión de gestiones diversas.
Nos hospedamos, gracias a la grata generosidad de mi camarada Ignacio, en su casa, un gran tipo, motero hasta la médula y muy ducho en gestiones moteras, viajes y todo aquello que se tercie en referencia al tema, o no, ehhhh X., jeje, menudo apaño a la Yamy le hizo, muchas gracias Ignacio, a ver si nos vemos pronto y volvemos a rutear por ahí.
El miércoles fue una pasada, no paramos de hacer cosas. De entre ellas la más importante no os la contamos aún, si sucede ya habrá tiempo de contar de todo. (Se trató de que teníamos Cita con Yamaha España, aunque al final no nos cedieron las Teneré- 1200 …).
Las otras cosillas, pues hablamos con Middland, será otro de nuestros patrocinadores, nos van a pasar toda la gestión de comunicación entre X. y yo desde las motos, buenos intercomunicadores. (Al final, creo una mala instalación resultaron mal en el viaje, la vida..)
También nos sacamos el Visado Mongol, aunque falta el ir a recoger el mismo junto con el pasaporte.
Más, pues visitas a tiendas de motos, tomar unas buenas birras en el mejor Pub motero de Barcelona, “El Paddock”, unas Guinnes de escándalo, con amigos geniales como Federico e Ignacio y toda esa gente tan agradable que forman ese rincón motero, con sabor puro a tubo de escape, carburadores, gasolina, motores, carreras, rutas...., muchas gracias.
La vuelta fue algo menos lluviosa, salimos rumbo Tarragona por la autovía, ya día mejor y en Reus nos separamos, bueno un poco antes, para ya cada uno irse a sus aposentos diarios. X. hacia Alicante y yo hacía Cuenca.
Mi ruta de vuelta fue en solitario, tras Reus, demasiados rádares en las cunetas…uggg, pero bien, muy de relax, algo cansado y tras Utrillas, la ruta de la N-420, viento y la lluvia amiga, no me dejó que hiciera toda la ruta en seco, cosas del viajar.
Y así acaban estos días agradables, de mucha moto y contento, unos 530 kms. De ida y otros de vuelta, con buenos amigos y feliz de viajar en moto y luchar por los sueños.
Un abrazo a todos y todas.
Vicente
www.vmalpica1964.blogspot.com
